El gobernador de Tabasco, Javier May Rodríguez, se ha posicionado en el top 10 de los mandatarios mejor evaluados del país, ocupando el noveno lugar con una calificación de 6.7, de acuerdo con la más reciente encuesta de la empresa Rubrum. Este resultado refleja la percepción ciudadana sobre su gestión, destacando su cercanía con la población, la atención a las necesidades concretas de los tabasqueños y la implementación de políticas que buscan transformar el estado desde el territorio.




En un mensaje publicado en sus redes sociales, May Rodríguez celebró este reconocimiento y afirmó que su gestión continúa “demostrando que la transformación se construye escuchando al pueblo y atendiendo sus necesidades con resultados reales”, resaltando su compromiso con la transparencia, la eficiencia y la cercanía con la ciudadanía.
La encuesta posiciona al mandatario ligeramente por debajo de Alfonso Durazo, gobernador de Sonora, quien obtuvo una calificación de 6.74. Por su parte, la líder del ranking nacional es María Teresa Jiménez Esquivel, gobernadora de Aguascalientes, con 7.4 puntos. Estos resultados ofrecen una radiografía del desempeño de los gobiernos estatales y la percepción pública sobre la gestión de cada mandatario.
El estudio realizado entre el 27 y el 30 de septiembre mediante entrevistas telefónicas a mil ciudadanos mayores de 18 años, evaluó aspectos fundamentales como la seguridad pública, la cercanía del gobernador con la población, el sistema de salud estatal, el manejo de la crisis del agua, la movilidad, las obras públicas, la transparencia y la accesibilidad de la información. Con un margen de error de ±3.8%, la encuesta refleja de manera precisa la opinión de la ciudadanía sobre el impacto de las políticas y acciones de los gobernadores en la vida diaria de sus estados.
Este reconocimiento no solo evidencia la buena aceptación de Javier May Rodríguez como líder, posiciona a Tabasco como un estado en desarrollo, con una gestión comprometida con la mejora de la calidad de vida de sus habitantes, la transparencia y la atención efectiva a las necesidades de la población. La calificación refleja la percepción de los ciudadanos sobre la responsabilidad, eficiencia y empatía del mandatario, consolidando su imagen como un gobernador cercano, confiable y enfocado en resultados tangibles.
El posicionamiento en el ranking nacional destaca la importancia de políticas públicas que combinan infraestructura, desarrollo social y participación ciudadana, reforzando la idea de que los resultados visibles en territorio generan confianza y legitimidad. Este reconocimiento representa un motivo de orgullo y un reflejo del trabajo constante de su gobierno en favor de una transformación que sea sostenible, inclusiva y basada en la voz de la ciudadanía.




