En medio de la exuberante selva tropical del sureste mexicano, donde el agua, la vida y la tradición se entrelazan, se encuentra uno de los destinos más sorprendentes de Tabasco: los Pantanos de Centla un santuario natural que guarda la esencia del llamado “Edén de México”.
Con el humedal más grande de Mesoamérica con más de 302 mil hectáreas de ecosistema protegido, los Pantanos de Centla son considerados uno de los pulmones naturales más importantes del continente, hogar de más de 255 especies de aves, reptiles, mamíferos y peces.
El visitante puede disfrutar de cabañas ecológicas equipadas con todas las comodidades, perfectas para descansar rodeado del canto de las aves y del murmullo del agua. En sus restaurante se sirven platillos típicos tabasqueños, elaborados con ingredientes locales como el pejelagarto, el camarón, el plátano y el cacao, en una fusión que deleita el paladar y conecta con las raíces gastronómicas del estado.
Pero lo más fascinante está en sus rutas fluviales a bordo de una lancha, los viajeros recorren los ríos Grijalva, Usumacinta y San Pedrito, atravesando túneles naturales formados por manglares centenarios, observando aves en su hábitat y descubriendo el equilibrio perfecto entre agua dulce y salada. En cada trayecto, los guías certificados en turismo de naturaleza comparten historias sobre la biodiversidad, la cosmovisión del pueblo Maya Chontal y la importancia de proteger este entorno.
Entre las actividades más solicitadas se encuentran la pesca deportiva, el senderismo interpretativo, la observación de fauna y las excursiones a la Playa El Bosque, donde el visitante puede nadar y admirar la impresionante unión del Golfo de México con los ríos tabasqueños. Quienes buscan una experiencia más completa pueden elegir entre diversas rutas temáticas, como:
- Ruta de los Manglares: un recorrido por los canales naturales y su densa vegetación acuática.
- Ruta de las Aves: ideal para fotógrafos y amantes de la naturaleza.
- Ruta San Pedrito: conecta las lagunas interiores y los tres brazos del río.
- Ruta del Golfo: un trayecto de día completo que culmina en la desembocadura del mar, pasando por la Isla del Buey y la Ciudad de Frontera.
Cada paseo está diseñado para despertar los sentidos y crear conciencia sobre la importancia de los ecosistemas costeros. Los visitantes pueden complementar su experiencia con hospedaje, restaurante, traslados, y visitas a atractivos cercanos como el Museo Casa del Agua – Centro de Interpretación Uyotot-ja, un espacio dedicado a la educación ambiental y la historia del agua en la región.
Visitar los Pantanos de Centla es mucho más que un paseo: es una oportunidad de reconectar con la naturaleza, admirar la riqueza cultural del estado y descubrir la esencia del Edén en su máxima expresión. Aquí, cada amanecer refleja la esperanza de un turismo que respeta, enseña y transforma.



