Con fuerza, convicción y un profundo sentido de justicia, más de 900 mujeres yucatecas participaron en las primeras dos asambleas del movimiento nacional “Voces por la Igualdad”, una iniciativa que busca construir un país más seguro, justo y equitativo para todas. El objetivo: que sus experiencias, preocupaciones y propuestas lleguen directamente a la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.



Los encuentros realizados en Umán y en el Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI en Mérida, se convirtieron en puntos de convergencia para cientos de mujeres de distintas edades, contextos y comunidades, incluyendo a representantes indígenas, jóvenes, madres, activistas, estudiantes y profesionistas. Bajo el liderazgo de la Secretaría de las Mujeres de Yucatán (Semujeres), encabezada por Sisely Burgos Cano, estas asambleas lograron un espacio de participación libre, seguro y sin censura.
A micrófono abierto y con solo un minuto para expresarse cada intervención fue un testimonio valiente, una exigencia legítima o una propuesta concreta. De estos encuentros surgieron 20 propuestas clave, sistematizadas y listas para integrarse a un documento nacional que será presentado al término del ciclo de asambleas, como parte de una política pública con enfoque de género y justicia social.
Entre las propuestas más destacadas de las mujeres se encuentran:
- Capacitación al personal educativo para detectar y atender casos de violencia contra mujeres y niñas.
- Garantizar la continuidad escolar de niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad.
- Incorporación de intérpretes de lengua maya en instituciones de justicia para asegurar el acceso de mujeres indígenas.
- Atención psicológica y legal gratuita para mujeres, niñas y adolescentes a través del DIF.
- Difusión y localización clara de centros de atención a víctimas, además de mayor eficiencia en los tiempos de respuesta ante denuncias.
También se propuso la creación de círculos de apoyo entre mujeres, la mejora del alumbrado público y la movilidad urbana como herramientas para construir entornos más seguros. Este enfoque integral refleja una demanda urgente de transformar las condiciones estructurales que perpetúan la violencia de género.
Durante la asamblea en Mérida, la titular de la Semujeres federal, Citlalli Hernández Mora, reconoció el encuentro como uno de los más concurridos a nivel nacional, subrayando el alto nivel de organización, conciencia y participación de las mujeres yucatecas. “Este compromiso colectivo demuestra que las mujeres del sureste están listas para liderar cambios reales”, expresó.
El gobierno de Joaquín Díaz Mena, actual gobernador del estado ha reiterado su compromiso con una vida libre de violencia para todas las mujeres, abriendo estos espacios de diálogo para que las voces femeninas sean escuchadas y consideradas en el diseño de políticas públicas.
La estrategia continuará durante el año con la realización de 29 asambleas en municipios donde operan los 31 Centros LIBRE (Libertad, Igualdad, Bienestar, Redes y Empoderamiento), con el objetivo de que la igualdad no solo sea una meta, una realidad tangible en cada rincón de Yucatán.
Este proceso además de visibilizar la violencia estructural que aún persiste, ha servido como plataforma para fortalecer redes de mujeres, fomentar el empoderamiento colectivo y proponer acciones puntuales que transformen el entorno inmediato de cientos de participantes.
En palabras de muchas de ellas, «alzar la voz no es solo un acto de valentía, sino una forma de resistencia». Y en Yucatán, las mujeres lo están haciendo con fuerza, dignidad y esperanza.





