En el vestíbulo principal del Congreso del Estado se levanta una obra monumental que ha convertido al recinto legislativo en un espacio de arte y memoria: el mural “Heredarás el Universo”, creado por el maestro autodidacta Daniel Ponce Montuy, originario de Frontera, Centla. Con una extensión de 169 metros cuadrados, esta pieza fue pintada a lo largo de tres años y quedó inaugurada en 1991, durante la LIII Legislatura y el gobierno de Salvador Neme Castillo.
Más que un mural, “Heredarás el Universo” es un recorrido visual por la historia de México y Tabasco en sus trazos conviven las culturas originarias, los procesos de conquista y mestizaje, los movimientos de independencia y revolución, así como las intervenciones extranjeras y los desafíos de la modernidad. Su valor radica en que no solo plasma acontecimientos históricos, revela cómo estos han moldeado la identidad y el espíritu de los pueblos.
Raíces y mestizaje en el lienzo
En la parte inferior derecha, un personaje olmeca montando un tigre con una espada de piedra simboliza la influencia de esta cultura sobre la maya. En el lado opuesto, las fauces de una serpiente azteca devoran tanto a españoles como indígenas, metáfora del mestizaje que dio origen a una nueva nación sobre esta figura, un águila se eleva como emblema de la libertad y la mexicanidad.
La narración mural también incluye escenas del virreinato, donde aparecen españoles vestidos a la usanza de la época representando la imposición cultural y religiosa. Los huesos expulsados por otra serpiente muestran la integración forzada de ambas culturas más arriba, se observan a Isabel la Católica y Fernando de Aragón, financiadores de los viajes de Colón, rodeados de angelitos que simbolizan la gloria española.
Lucha por la independencia y la libertad
Se encuentran los grandes héroes de la independencia: Miguel Hidalgo, José María Morelos, Ignacio Allende, Vicente Guerrero y Josefa Ortiz de Domínguez. A sus pies, Cristóbal Colón aparece encadenado, representando el fin de una era y la traición de la corona española a quien abrió el continente.
La independencia no aparece como un hecho aislado, como un proceso de resistencia que desembocó en la construcción de una nación libre. En ese tránsito, figuras como Agustín de Iturbide y los criollos intentaron apropiarse del poder, mientras que los pies con sandalias que emergen en la pintura representan la raíz profunda de la nacionalidad mexicana.
Reformas, revolución e identidad nacional
El Caballero Águila ocupa un lugar central armado con arco y flecha, rodeado de personajes históricos de la Reforma y la Revolución, entre ellos Benito Juárez, Francisco I. Madero, Venustiano Carranza, José María Pino Suárez, Porfirio Díaz y Emiliano Zapata. En su brazo, un desfile de personajes con antorchas y banderas rojas recuerda las luchas por la libertad en todo el mundo.
La Revolución Mexicana, con sus ideales de justicia y democracia, se representa como una continuidad de la lucha por la independencia mientras que Juárez se erige como símbolo del Estado laico y de la soberanía nacional.
Intervenciones extranjeras y nuevos desafíos
En la parte superior, refleja momentos de intervención extranjera la invasión norteamericana se simboliza con un buitre armado sostenido por esclavos negros, recordando los abusos de poder y la explotación. La intervención Francesa aparece con Maximiliano y Carlota, él atravesado por una espada y ella con las manos ensangrentadas, reflejando la tragedia del Segundo Imperio Mexicano.
La obra anticipa los retos contemporáneos: en la esquina superior izquierda, una garra mecánica cubierta de monedas de oro intenta apoderarse de los valores nacionales, aludiendo al Tratado de Libre Comercio y al avance de las transnacionales. Esa imagen funciona como advertencia sobre la nueva forma de dominación económica.
Un legado cultural y político
El mural “Heredarás el Universo” no solo embellece al Recinto Legislativo, se ha convertido en un legado cultural y político de Tabasco y México. En sus colores y símbolos se resguarda la memoria de siglos de lucha, resistencia y transformación.
La obra de Daniel Ponce Montuy es hoy un referente para investigadores, historiadores, artistas y ciudadanía en general. Es un recordatorio de que la identidad mexicana se construyó en medio de conquistas, fusiones culturales, resistencias heroicas y sueños colectivos de libertad.
A más de tres décadas de su inauguración, sigue invitando a mirar al pasado para entender el presente y proyectar un futuro en donde la memoria y el arte sigan siendo pilares de nuestra historia.
